amores no tan a distancia

Qué distancia tan fría la que separa tu cuerpo del mío. Noto el verano afuera, los rayos del sol en su máxima expresión, dándole color y vida a todo lo que me rodea. Sin embargo, aquí adentro es invierno. No sé cómo definir exactamente ésta sensación, pero digamos que me encuentro en "neutro".

Distancia incómoda y llena de kilómetros.

Increíble como alguien pueda estar físicamente lejos, pero la sientes todo el tiempo contigo, esa conexión. Sientes  como la brisa trae su risa contagiosa... Y de repente, miles de momentos, gestos, aparecen frente a ti, y entonces, viene esa calidez. Tranquilidad.

Esto de la distancia es todo un sube y baja, una montaña rusa de emociones. En un segundo, eres la persona más feliz, pero en otro ya no lo eres tanto.

Distancia incomprendida, personas irracionales, llegan los comentarios externos. Infidelidad, fracaso, complejidad, y otras palabras que te dejan más rota de lo que ya estabas. Pero NO, nadie debe intervenir en un amor que solo es de DOS. Nadie más que ustedes saben la complicidad del amor, de SU AMOR. Nadie ve las sonrisas que hay detrás de leer un par de líneas románticas, de escucharse, de compartir anécdotas. Nadie verá esas frías lágrimas deslizarse por sus mejillas porque se extrañan, NADIE a excepción de ustedes dos saborea ese amor que ustedes íntimamente han creado. Un amor lindo, fuerte y puro.

El camino correcto a veces no es el más fácil. Me gusta pensar que soy afortunada de sentir(te) tan cerca estando tan lejos... Incluso, personas que estando justo al lado de otra, no sienten absolutamente nada. Se encuentran físicamente cerca, pero están tan lejos sentimentalmente. Es triste hasta pensarlo... Pero en fin, ese es otro tipo de distancia. (La menos bonita, para mi)

La distancia es injusta, y amarga. Pero nunca es el problema... Los problemas los traemos nosotros, pero el amor nos va enseñando a manejarlo, a enfrentarlos, y nos va mostrando cómo amar sin tocar, sin ver. 

La distancia, puede impedir que dos cuerpos estén juntos, sí. Pero jamás va interferir en dos sentimientos tan fuertes, que de la nada se transforman en uno.

Así llega la mejor parte, la favorita de todo ésto, estamos a un beso, a un abrazo de distancia... Inevitablemente, nos encontramos finalmente a centímetros. Y nos damos cuenta que no hacemos el amor, el simplemente nos hace.

Así es como te digo amor mío

 estés donde estés, recuerda... 

Te llevo siempre conmigo, todos mis días. 

No tan cerca, pero sí muy dentro. 

Alejandra Martínez